Violencia Política contra las Mujeres: Un Desafío Persistente en el Aniversario de ONU Mujeres

Prueba del interés suscitado por este observatorio es que el evento contó con la participación de destacados representantes del cuerpo diplomático, organizaciones de mujeres y autoridades públicas. Se enfatizó la necesidad de un enfoque sistémico para evaluar la integridad de las elecciones y garantizar el ejercicio pleno de los derechos humanos y políticos. El embajador de Estados Unidos en El Salvador, William Duncan, subrayó la importancia de abordar este problema: "La violencia política contra las mujeres no solo es una violación de los derechos humanos, sino también un obstáculo significativo para el desarrollo democrático. Es esencial que trabajemos juntos para garantizar un entorno político seguro y equitativo para todas las mujeres."

Nelly Esmeralda Vindel Arana, Secretaria General de la Asociación Nacional de Regidoras, Síndicas y Alcaldesas Salvadoreñas (ANDRYSAS), destacó la falta de marcos legales adecuados y la debilidad de las instituciones estatales para enfrentar la violencia política de género. "La violencia política contra las mujeres es una barrera para su participación y permanencia en espacios de liderazgo y toma de decisiones", afirmó Vindel Arana.

Los obstáculos a la vida política de las mujeres

Como señalaron las especialistas de ANDRYSAS que expusieron los resultados del informe, es crucial entender qué se considera cuando se habla de la vida política de las mujeres. Este término abarca no solo a las candidatas y funcionarias públicas, sino también a las simpatizantes, votantes y cualquier mujer que participe activamente en la esfera política, ya sea a nivel local, nacional o regional. La violencia política, por lo tanto, se refiere a las acciones u omisiones que buscan menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de los derechos políticos y civiles de las mujeres.

Miriam Bandes, representante de ONU Mujeres en El Salvador, enfatizó que "la violencia política no solo afecta a las mujeres directamente involucradas, sino que también desanima a otras mujeres a participar en la política, perpetuando la desigualdad. Este observatorio es una herramienta fundamental con la que puede contar ANDRYSAS para enfrentar estos desafíos."

Se identificaron en el análisis del estudio varios obstáculos que minan la participación política de las mujeres:

- Brecha de Conciliación: Las mujeres enfrentan una carga desproporcionada de responsabilidades de cuidado, lo que limita su participación en eventos políticos y sociales.

- Educación y Formación Política: La baja formación en temas políticos y de liderazgo dificulta que las mujeres tomen decisiones informadas y participen en igualdad de condiciones.

- Techo de cristal: Las mujeres enfrentan barreras invisibles que limitan su avance en la carrera política, a pesar de la cuota mínima de participación del 30% establecida por ley.

Las manifestaciones de violencia identificadas

El informe revela que la violencia política se manifiesta en diversas formas, incluyendo violencia psicológica, simbólica y sexual. Estas formas de violencia no solo afectan a las candidatas y funcionarias públicas, sino también a las mujeres votantes y militantes partidarias.

- Violencia Psicológica y Emocional: Es la forma más común de violencia reportada, con un 58% de los casos registrados durante las elecciones generales de febrero y marzo. Esta forma de violencia afecta profundamente el bienestar mental y emocional de las mujeres involucradas en la política.

- Violencia Simbólica: Incluye acciones que desvalorizan y estigmatizan a las mujeres, minando su confianza y credibilidad. Se reportaron numerosos casos en los que las mujeres fueron objeto de comentarios despectivos y humillantes en redes sociales y medios de comunicación.

- Violencia Sexual: Aunque menos reportada, con un 14% de los casos, sigue siendo una preocupación significativa. Se documentaron casos de acoso y agresiones sexuales que buscan controlar y subyugar a las mujeres.

Datos Relevantes del Monitoreo Digital

El informe también incluyó un exhaustivo monitoreo digital. Se monitorearon 50 cuentas de candidatas y candidatos en Facebook y 269 cuentas en X (anteriormente Twitter) utilizando el programa "Brandwatch". Los resultados mostraron que se generaron 86 097 agresiones durante el período de observación de 350 días. De estas agresiones, el 60% se dirigieron a mujeres y el 40% a hombres, pero la intensidad y frecuencia de los ataques contra mujeres fueron significativamente mayores.

El informe subraya la necesidad de movilizar a la sociedad para actuar contra la violencia política de género. Se hace un llamado a las autoridades electorales, los partidos políticos y las organizaciones de la sociedad civil para crear condiciones equitativas y espacios seguros de participación política. Además, se insta a los ciudadanos a no aceptar ni normalizar la violencia en ninguna de sus formas.

"La violencia política contra las mujeres no es solo un problema de las mujeres, sino de toda la sociedad", señaló Eduardo Nuñez, director de la oficina de El Salvador y de los Programas Regionales de NDI para Centroamérica en su presentación. Para construir una democracia inclusiva y equitativa, es esencial erradicar todas las formas de violencia y asegurar una participación política efectiva y en condiciones de igualdad para las mujeres.

Para más información, puede consultarse los informes publicados por ANDRYSAS [aquí].